La huella de carbono es uno de los indicadores que mejor refleja el impacto ambiental que causamos los humanos en el planeta. A pesar de que la contaminación ha disminuido desde 2008, los hogares españoles se proclaman con un 23% del total de emisiones de gases de efecto invernadero en 2021, según datos del INE. La huella de carbono es importante para tomar medidas y poner en marcha las iniciativas necesarias para reducirla al máximo, empezando por cada uno de nosotros en nuestro día a día. 

Muchas de las tareas que realizamos diariamente generan un gran aumento de la huella de carbono: desde coger el coche para ir a trabajar, hasta poner la lavadora o ver la televisión. Casi todo lo que hacemos tiene un impacto en el planeta, y es nuestra responsabilidad intentar mitigar estos efectos. Por ello, hoy te traemos 5 consejos que pueden ayudarte a reducir tu huella de carbono en tu día a día.   

¿Qué es la huella de carbono? 

La huella de carbono es el rastro de gases de efecto invernadero (GEI) que dejan las actividades humanas. Estas emisiones incluyen no solo el CO₂, sino también otros gases de efecto invernadero como el metano (CH4) y el óxido nitroso (N2O), convertidos en equivalentes de CO₂ para facilitar la comparación. 

Dependiendo de la actividad en la que nos centremos se pueden distinguir distintos tipos de huella de CO₂, normalmente en términos de emisiones anuales de gases de efecto invernadero: 

• Huella de carbono personal: es una medida asociada con las actividades cotidianas de un individuo. Esto incluye el consumo de energía en el hogar, el transporte, las compras y otras actividades que generan emisiones de carbono. 

• Huella de carbono de producto: es una medida de las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas con la fabricación, distribución, uso y disposición final de un producto específico. Esta medida permite evaluar el impacto ambiental de un producto a lo largo de su ciclo de vida completo, desde la extracción de materias primas hasta su eliminación final.

• Huella de carbono corporativa: es una medida de las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas con las operaciones de una empresa u organización. Esto incluye no solo las emisiones directas de las instalaciones y vehículos de la empresa, sino también las emisiones asociadas con la electricidad comprada y el transporte de los productos, así como las relacionadas con la cadena de suministro y el uso de productos. 

En este artículo nos centraremos en la huella de carbono personal, ofreciéndote 5 consejos para poder reducirla.  

5 consejos para reducir tu huella de carbono 

1. Compra productos de proximidad 

Siempre que sea posible, intenta adquirir productos de proximidad o locales. De esta manera estarás reduciendo los gases de efecto invernadero producidos por el transporte de estos productos. Cuanto más cerca esté el producto del consumidor final, menos huella de carbono generaremos.  

Además, apuesta por productos locales y de temporada siempre que puedas, y procura que estén cultivados o fabricados de forma sostenible.  

2. Utiliza energías renovables en tu hogar 

Considera cambiar a fuentes de energía renovable en tu hogar, como la energía solar o eólica. Estas hacen posible el reducir la huella del carbono, al no emitir ningún tipo de gas de efecto invernadero. Investigar programas de energía limpia y apoyar la generación de energía renovable también puede ser una forma efectiva de reducirla también. 

3. Apuesta por la movilidad sostenible 

Un coche promedio produce aproximadamente 4,6 toneladas métricas de dióxido de carbono por año. Por ello, reducir su uso es una gran medida que puedes adoptar para reducir tu huella de carbono. Utilizar otros métodos de transporte como el tren o la bicicleta, es una buena forma de comenzar a reducirla.  

Otra opción que puedes adoptar es la de adquirir un vehículo eléctrico, que reducirá en gran cantidad tus emisiones de gases de efecto invernadero.  

4. Disminuye la cantidad de residuos 

Reduce la cantidad de residuos que generas eligiendo productos duraderos y evitando el uso de productos de un solo uso. Reutiliza y recicla siempre que sea posible, y asegúrate de desechar adecuadamente los residuos orgánicos y reciclables. 

5. Cambia tus hábitos de consumo eléctrico 

Si aplicas varias de estas pequeñas variaciones en el uso de tu energía, provocarás una reducción significativa en la emisión de gases contaminantes: 

• Intenta no dejar cargadores o aparatos eléctricos enchufados si no los estás utilizando.  
• Apuesta por electrodomésticos de bajo consumo que te permitan ahorrar energía y reducir la factura de la luz al mismo tiempo.  
• Utiliza bombillas LED.

En Caja Ingenieros hemos creado una herramienta, Impacto Ambiental, que es capaz de medir la huella de carbono e hídrica que generan tus compras o transacciones. De esta manera puedes ser más consciente de tu impacto en el planeta.  

La huella de carbono es una herramienta esencial para evaluar y abordar nuestro impacto en el medio ambiente. Al calcular y reducir nuestra huella de carbono, podemos contribuir de manera significativa a la lucha contra el cambio climático y construir un futuro más sostenible y equitativo para las generaciones venideras.