La micromovilidad está cada día más presente en las grandes ciudades. La manera de movernos por la ciudad está cambiando. Cada vez más optamos por vehículos personales más sostenibles y prácticos —esto incluye bicicletas y patinetes compartidos—, que nos aportan autonomía para desplazarnos donde y cuando queramos. El aumento de los carriles bici han empujado a los ciudadanos a desplazarse con medios de transporte más sostenibles. Dentro de este nuevo paradigma, han jugado un papel muy importante las empresas de alquiler de bicis y patinetes eléctricos, que han crecido exponencialmente.
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