Artículos guardados
¡Benditos robots!

Actualidad

¡Benditos robots!

Los vehículos autónomos ya son una realidad desde el punto de vista tecnológico. Y, según la DGT, hay más de 330.000 conductores profesionales asalariados en España.

Después de leer estas dos frases es posible que pienses que los robots acabarán quitándonos el trabajo a los humanos. Sin embargo, yo pienso que esa lectura es demasiado simplista y catastrofista. Y asumirla como cierta y difundirla no solo es inútil, sino también irresponsable.

Los robots no van a asumir nuestros trabajos. Los robots van asumiendo algunas de nuestras tareas y, a medida que lo hacen, nos van liberando para poder hacer otras de mayor valor añadido que aumentan nuestra productividad.

Un ejemplo de ello es este mismo artículo, escrito desde el móvil en menos de lo que tarda un AVE en ir de Madrid a Zaragoza.

Sin los avances actuales, este artículo me hubiera llevado por lo menos varios días. Para redactarlo, primero hubiera tenido que consultar los datos de la DGT. Sin la inteligencia artificial y el big data del algoritmo de Google, seguramente me hubiera tenido que desplazar a una biblioteca. Si no hubiera tenido un procesador de textos, hubiera tenido que dictárselo a una secretaria para que lo pasara a máquina y enviárselo al editor de la revista corporativa de Caja de Ingenieros para su impresión y distribución.

¡Menos mal que ya no es así! Porque ahora que lo he terminado, tengo tiempo de hacer otras cosas que crean mucho más valor que desplazarme a una biblioteca, pasarlo a máquina o esperar a que se publique. ¡Benditos robots!

CUESTIÓN DE ACTITUD

Si tomara una actitud contraria al progreso y tratara de evitarlo o me resistiera, sin duda, saldría perdiendo.

Hoy en día sigue habiendo bibliotecarios, secretarias e imprentas. Los bibliotecarios trabajan con sistemas informáticos que los hacen más productivos y publican sus recomendaciones en medios digitales que ayudan a miles de personas. Los asistentes virtuales pueden dar servicios de alto valor trabajando desde casa para clientes que están a miles de km de distancia. Y las imprentas que han incorporado maquinaria de última generación son capaces de imprimir toda clase de productos en menos tiempo.

Los únicos que se han quedado sin trabajo son aquellos que no se han renovado y se han quedado atrás. Eso no tiene que ser así porque, afortunadamente, el aprendizaje también está avanzando gracias a la tecnología. Iniciativas como Capaball (capaball.com) prometen revolucionar la manera de aprender utilizando machine learning para formar a personas; y en Mamis Digitales estamos convirtiendo a madres en community managers profesionales en menos de 4 meses usando el móvil.

Como dice el ministro de trabajo sueco Ylva Johansson, “Si le preguntas a un líder sindical sueco si le da miedo la nueva tecnología responde: No. Me da miedo la vieja tecnología. Cuando los trabajos desaparecen, formamos a los trabajadores para que hagan nuevos trabajos. No protegemos puestos de trabajo. Protegemos trabajadores.”

Deja de pensar en los robots y la automatización como el enemigo. Cuanto antes empieces la transformación digital de tu organización y, sobre todo, de sus trabajadores, más probabilidad tendrás de beneficiarte de un cambio inevitable.