¡La Navidad ya está aquí! Esa época en la que aprovechamos para reunirnos con nuestros seres más queridos, comemos todos juntos y vemos cómo los más pequeños disfrutan de la magia de la Navidad. Pero… no todo es de color de rosa. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), cada año, a nivel nacional, se producen 4 millones de toneladas de residuos, el 30 % de los cuales se generan en este período. Envolver los regalos de Navidad perjudica seriamente al medioambiente.
Aunque todos los papeles tienen un impacto directo en el medioambiente, los que se usan para envolver regalos son los que más contaminan. Es un tipo de papel muy débil y especial que contiene pigmentos químicos que imposibilitan su reciclaje.
¡Estas Navidades sé más ecofriendly!
Cuando compres los regalos, pídelos sin envoltorio ni bolsa y conviértelos en regalos sostenibles. Envolver los productos con materiales reutilizables y ecológicos es una manera original de dar un regalo, a la vez que estás contribuyendo a reducir la huella ecológica a nivel mundial.
Si al comprar los productos lo hacemos de una manera más responsable, reduciremos los residuos generados durante las fiestas.
Si prefieres que te envuelvan los regalos, ante todo comprueba que el papel con el que se está envolviendo el regalo contenga el certificado ecológico para poder reciclarlo después.
Cómo envolver los regalos de manera sostenible:
- Papel reutilizable: compra papel especial que se pueda reutilizar tantas veces como sea necesario.
- Envoltorios con telas: ¡utiliza telas viejas para envolver los regalos!
- Papel reciclado: si lo tuyo es la creatividad, utiliza papel reciclado y decóralo a tu gusto.
- Cajas de origami: son cajas con un estilo único que se pueden utilizar para decorar el hogar.
- Periódico: tiene un punto vintage y le darás una segunda vida a este tipo de papel.
- Papel de estraza: proviene de la pulpa de la madera y no contiene tinta, por lo que se puede reciclar. Además, para darle un toque de color siempre se puede decorar con elementos naturales, como piñas y hojas secas, entre otros.
Para el planeta, menos es más
Apagar las luces del árbol cuando no se está en casa, usar el transporte público para acudir a las cenas navideñas, hacer regalos sostenibles manuales para el amigo invisible, entre otras recomendaciones, son también una buena manera de sumarse a reducir la huella ecológica.
Aunque la Navidad es una celebración familiar, también tiene como consecuencia imágenes de vertederos llenos de residuos desechados. Antes de comprar, piensa en el impacto ambiental. Hagamos de la Navidad un encuentro emotivo y, a su vez, responsable con el medioambiente. Eduquemos a los más pequeños de la casa para que entiendan que el consumismo es positivo, siempre y cuando no altere el ecosistema del planeta.
¡Estas Navidades regala de forma sostenible!
