En la actualidad, las grandes organizaciones apuestan por la fabricación masiva de stock y ofrecen una gran variedad de productos en grandes cantidades. A través de la sobreproducción, entre otros factores, estas empresas consiguen precios generalmente más bajos que al consumidor le pueden parecer más atractivos. No obstante, la calidad y la durabilidad de los productos pueden ser inferiores. Además, esta estrategia tiene unas consecuencias negativas para nuestro planeta. Por ello, algunas empresas con más conciencia medioambiental están implantando una nueva estrategia llamada on-demand.
¿Qué es la producción on-demand?
La producción on-demand es una nueva estrategia de sostenibilidad que está ganando popularidad entre algunas empresas. En lugar de producir grandes cantidades de producto y esperar a que se vendan, estas marcas solo producen lo que se ha comprado.
La producción on-demand reduce el exceso de stock y permite almacenarlo, por ejemplo, en un inventario en línea. De este modo, el riesgo de stock sobrante se reduce, lo que permite una mayor flexibilidad en términos de personalización de productos y servicios y mejora la eficiencia en la cadena de suministro. Esta nueva estrategia de producción y comercialización tiene varias ventajas ambientales y éticas que os explicamos a continuación.
Las ventajas ambientales
Una de las principales ventajas de la producción on-demand es la reducción del desperdicio de inventario. Muchas empresas producen grandes cantidades de ítems que no se venden y terminan en el mercado de segunda mano o en vertederos. Al producir solo lo que se ha comprado, se evita este desperdicio y se aprovecha al máximo cada producto producido. Además, al no tener un inventario excesivo, se reduce el almacenamiento y la energía necesaria para mantenerlo.
La producción on-demand también puede reducir el impacto ambiental de la producción. Al producir solo lo que se ha comprado, se pueden reducir las emisiones de CO2 y el uso de recursos naturales. Además, al no tener que producir grandes cantidades, se puede reducir el uso de maquinaria y energía en las factorías.
Además, con la on-demand se intenta evitar la cultura del “usar y tirar”, en la que los productos se desechan rápidamente en lugar de repararlos o reutilizarlos. Por ello, se utilizan materiales de mayor calidad y atemporales con el objetivo de frenar el problema del vertedero y el cambio climático.
Por lo tanto, la producción sostenible es necesaria para reducir el impacto ambiental y social.
Las ventajas éticas
La producción on-demand también es un beneficio ético, ya que evita la producción masiva en factorías donde puede haber condiciones laborales inadecuadas. Al producir solo lo que se ha comprado, se reduce la necesidad de trabajar en condiciones extremas y se puede mejorar la calidad de vida de los trabajadores en las fábricas. Además, al no tener que producir grandes cantidades, se puede reducir la presión sobre los trabajadores y mejorar las condiciones laborales.
Limitaciones
Sin embargo, es importante mencionar que la producción on-demand también tiene sus limitaciones. En este tipo de producción, el usuario puede tardar más en recibir un pedido, ya que el producto se produce tras su pedido. Además, para las empresas, los costos de producción pueden ser más altos debido a la necesidad de producir prendas de forma individual. Finalmente, para algunas marcas puede ser difícil adaptarse a esta estrategia, ya que requiere una mayor flexibilidad y adaptabilidad en la producción, algo que no todas pueden implantar con facilidad.
¿En qué sectores podemos encontrar este tipo de producción?
El principal sector en el que se está implantando es la industria de la moda. En los últimos años, las grandes empresas del sector de la moda han optado por la moda fast fashion y han llegado a producir hasta veinte colecciones al año. Este sistema de producción y de comercialización no es compatible a largo plazo con el cuidado del medioambiente.
Por este motivo, algunas marcas están optando por apostar por modelos de producción más sostenibles como la moda on-demand. A través de esta modificación logran crear colecciones más atemporales con prendas de mayor calidad y durabilidad con el objetivo de adaptarse a la demanda de sus clientes, a la vez que procuran respetar al máximo el medioambiente. De la misma manera, también pueden mejorar las condiciones laborales de sus empleados y evitar los desperdicios de stock, juntamente con las consecuencias negativas que estas prácticas implican.
Una estrategia sostenible para el futuro del planeta
La producción on-demand es una estrategia sostenible que tiene un impacto positivo en la reducción del desperdicio de inventario, en la reducción de emisiones de CO2 y en la mejora de las condiciones laborales. Desde Caja de Ingenieros queremos animar a los consumidores a elegir marcas que promuevan estos valores en su producción, como son la sostenibilidad y la ética laboral.
