En el célebre discurso del 2015, Mark Carney, el gobernador del Banco de Inglaterra, definía el cambio climático como “la tragedia del horizonte”1, constatando que se trata de un problema colectivo que supera los horizontes tradicionales del ciclo económico y político. La amenaza que nos llevará a todos a ser partícipes de una transición hacia modelos más sostenibles y responsables con nuestro entorno.
Con este discurso, Mark Carney levantó la voz sobre la alarmante situación que supone el cambio climático para las finanzas a escala global. El discurso, pronunciado en el Lloyd´s de Londres, supuso un toque de atención para el sector económico. Advirtiendo la necesidad de establecer un plan a largo plazo que gestione el riesgo financiero del cambio climático.
Como bien definió en aquel momento, la estabilidad financiera se puede ver afectada por el cambio climático por diferentes aspectos. En primer lugar, por el impacto de los fenómenos climatológicos, como inundaciones y tormentas, que dañan las propiedades y afectan a los compromisos de los seguros y al valor de los activos financieros. En segundo lugar, el riesgo de la responsabilidad.
Los impactos que surgirán en el futuro si las partes que han sufrido pérdidas o daños por los efectos del cambio climático piden indemnización a aquellos que consideren responsables. Por último, los riesgos de la transición, los riesgos financieros que podrían derivarse del proceso de ajuste hacia una economía baja en carbono.
El cambio climático tiene un impacto obvio sobre la estabilidad financiera. El cambio de modelo energético implica que industrias que tenían mucho valor, como, por ejemplo, las gasolineras, ahora dejen de tenerlo. Como entidad financiera estos son riesgos que estamos obligados a gestionar.
El cambio climático pose en riesgo la estabilidad financiera
Como bien afirmaba Carney, cualquier reacción eficiente del mercado ante el cambio climático tiene que estar basada en la transparencia y la información. La combinación de la evidencia científica y de la dinámica del sistema financiero sugiere que, con el paso del tiempo, el cambio climático amenazará la capacidad de adaptación financiera y la prosperidad a largo plazo.
Con mejor información de base, podemos construir un círculo virtuoso para una mejor comprensión de los riesgos del futuro. Un mejor precio para los inversores, mejores decisiones de los responsables políticos y una transición suave hacia una economía baja en carbono. Si gestionamos de manera efectiva estas mediciones, podemos romper la tragedia del horizonte.
En Caja de Ingenieros hace ya 15 años que apostamos por las finanzas y la movilidad sostenibles, que ahora toman un rol trascendental en la transición hacia modelos socialmente más responsables. Desde la banca cooperativa, la sostenibilidad, además, nos permite crear valor compartido. Este valor va más allá de lo que es considerado estrictamente financiero. Nuestros compromisos con la sostenibilidad son el núcleo de nuestra estrategia. Financiar el cambio del modelo económico, gestionar riesgos tanto climáticos como de transición, y todo esto creando valor para la sociedad.
La sostenibilidad es el núcleo principal de nuestra estrategia porque sabemos que es de gran valor para la sociedad.
Como romper la tragedia del horizonte
Asimismo, el papel de la banca cooperativa es un activo que tiene un gran impacto positivo en la sociedad. Desde el Grupo seguimos llevando a cabo acciones para dar prioridad a las personas, como la creación de CIMS, la nueva calculadora de impacto medioambiental y social.
Coincidiendo con la #MobilityWeek y el compromiso del Grupo en fomentar transportes más sostenibles, clausuramos el Monográfico de Movilidad Eléctrica. Este acto reunió a más de unas treinta voces expertas de primer nivel para visibilizar los debates actuales y contribuir a una mejor comprensión de los retos sobre la nueva movilidad.
En esta línea, desde las diferentes entidades tenemos que hacer un llamamiento a las administraciones para que faciliten al máximo la ejecución de proyectos y procedimientos que trabajen por la sostenibilidad. El gran reto de la sociedad actual. Solo así, con el compromiso colectivo, conseguiremos el cambio que esperamos para las sociedades futuras y, como bien decía Carney, acabaremos con la tragedia del horizonte.
[1] Carney, M. (2015), «Breaking the Tragedy of the Horizon – climate change and financial stability», discurso en el Lloyd’s of London.
