El mes de septiembre es el mes de vuelta a la rutina para los más mayores y de vuelta a la escuela para los más pequeños después de las largas vacaciones de verano. En el artículo de hoy os presentamos diferentes consejos para hacer una vuelta a la escuela más sostenible.
En la lucha contra el cambio climático, muchas veces son los más pequeños los que nos están llamando la atención por la situación preocupante que tenemos delante. Recientemente, han surgido movimientos como el de Greta Thunberg, #FridaysForFuture. Iniciativas como esta son la prueba del cambio que estamos viviendo y que, al margen de los grupos políticos, se están organizando colectivos con el objetivo de mejorar nuestro entorno y convertirnos en una sociedad más responsable.
La vuelta a la escuela es un momento clave para transmitir conceptos fundamentales como la sostenibilidad, el consumo responsable y el reciclaje. Intentar despertar la conciencia ecológica en nuestros hijos e hijas y enseñarles desde casa a vivir de manera más sostenible. Un aspecto fundamental para el bienestar y para el futuro de nuestro planeta.
Material escolar eco-friendly
Es importante que, a la hora de escoger el material que necesitaremos, planteemos una lista previa de todo aquello que nos hará falta. Sobre todo de cara a intentar reaprovechar el máximo material escolar que ya utilizamos el año pasado, como puede ser, por ejemplo, el estuche o la mochila.
Es importante también que, una vez tengamos esta primera lista, intentemos que los productos nuevos sean lo más ecológicos posible. Intentar que sean productos de calidad para que tengan una mayor durabilidad, así podremos usarlos durante más tiempo. También podemos optar por productos reutilizables, como, por ejemplo, los bolígrafos recargables.
Para saber si un producto es ecológico puedes buscar la etiqueta del papel con certificación forestal PEFC o FSE en las libretas o agendas. Cuando compres material escolar es importante recordar que el plástico, además de contaminar nuestros mares, se fabrica con un tipo de petróleo, un combustible fósil muy contaminante. Por eso, una buena alternativa es optar por opciones biodegradables u orgánicas.
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Muévete de manera sostenible
Actualmente, disponemos de muchas alternativas de transporte sin la necesidad de tener que recurrir al coche. Es importante recordar que el sector del transporte es responsable del 9 % de las emisiones GEI, que son las responsables del cambio climático.
La alternativa más interesante para hacer una vuelta a la escuela sostenible es optar por el transporte público, el patinete o la bicicleta. Si, en tu caso, la escuela o el instituto te quedan lejos, siempre puedes optar por compartir el trayecto con otros compañeros de clase.
Reaprovecha e intercambia libros
Además de reaprovechar material escolar de otros años, es importante recordar la importancia de reciclar e intercambiar libros. La fabricación de papel genera un impacto ambiental negativo sobre el planeta. Cada kilo de papel producido emite a la atmósfera alrededor de 3 kg de CO₂. Por ello es relevante apostar por el intercambio de libros entre alumnos y vender o dar los libros del curso pasado. Existen plataformas de venta e intercambio de libros de segunda mano que ofrecen estos servicios como la Casa del Libro, Wallapop, Truequebook o Re-Read, entre otras muchas. Muchas veces, las propias escuelas organizan estos intercambios entre alumnos para fomentar el reciclaje.
Desayuno más sostenible
En la hora del recreo es muy habitual ver bocadillos envueltos con papel de plata o papel film transparente. Una tradición que es perjudicial para nuestro planeta y que todavía lo es más cuando la repetimos cada día. La solución es bien fácil, ya que hoy en día existen muchas alternativas sostenibles que evitarán la generación de estos residuos de plásticos.
Una buena alternativa es utilizar un envoltorio de tela plastificada o una bolsa de tela, que son fáciles de limpiar y guardar y te permiten reutilizarlos tantas veces como quieras. Podrás utilizarlos para llevar el bocadillo o una pieza de fruta.
Un segundo punto para hacer el desayuno más sostenible es, en la medida de lo posible, no llevar botellas de plástico desechable. La alternativa perfecta son las botellas de aluminio, que, además, hacen que se mantenga la temperatura de la bebida.
Si no encuentras una alternativa eco, haz que dure
La durabilidad suele ser la grande olvidada de la sostenibilidad. Y aquí tenemos que ser claros: más vale un producto “poco sostenible”, pero que nos dure diez años, que un producto “sostenible” y que nos dure uno. Y esto es importante recordarlo porque hay productos que son difíciles de encontrar en versión sostenible. En estos casos es importante buscar productos duraderos, con piezas fácilmente reemplazables o recargables.
Si tienes algún otro consejo para la vuelta a la escuela sostenible y quieres compartirlo con nosotros, no dudes en dejarlo en los comentarios. Nos encantará leeros y conseguir entre todos cuidar nuestro planeta al mismo tiempo que educamos a los más pequeños para un futuro más sostenible.
